Términos que por desgracia parecen estár de moda en la actualidad al salir continuamente en los medios de comunicación. Se trata de tres delitos de especial gravedad tipificados en el código penal como delitos contra la administración pública, pero pueden darse también entre particulares y tendrían otra denominación dentro de delitos de corrupción entre particulares, son cada vez más habituales y son una manifestación de la corrupción y de la penetración del crimen organizado en el tejido social y en las estructuras del estado.
Veremos en primer lugar en que consiste cada uno de ellos y a continuación como con la intervención de un detective privado se pueden investigar este tipo de casos tanto de un modo puramente preventivo como con el fin de hallar indicios o pruebas suficientes para poder presentar una demanda judicial o denunciarlo a los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado.
Qué son estos tres delitos?
Malversación
Es un tipo especial de apropiación indebida o de administración desleal consistente en la utilización de fondos, patrimonios y bienes públicos que son confiados a una persona con responsabilidad pública o fiduciaria y que ésta a sabiendas, desvía para usos ilegítimos, personales o no autorizados. También este delito puede ser cometido por un particular que se encarga de gestionar fondos o rentas de la administración pública así como depositarios de dinero, bienes embargados o administradores concursales, se trataría de una malversación impropia. En el caso en que todos los hechos sean entre particulares sería un delito de apropiación indebida, también conocido cuando se produce en empresas con el nombre de desfalco. La malversación se halla tipificado dentro de los delitos contra la administración pública en los artículos 432 a 435.
Cohecho
Es la acción de sobornar o dejarse ser sobornado para influir en la conducta de una persona en una posición de autoridad, especialmente un funcionario público. Es decir ofrecer, dar, recibir o solicitar algo de valor, pudiendo ser dinero, regalos o favores, o dejarse hacer ello, con el fin de influir en la conducta de esta persona. Cabe diferenciar dos tipos de cohecho, cuando recibe la dadiva por realizar acciones contraria a los deberes de su cargo o prohibidos y cuando la recibe realizando actos propios de su cargo o no prohibidos. Este comportamiento también se da entre particulares y pertenece a los delitos de corrupción entre particulares, lo cuales provocan graves daños económcos en el sector empresaria. El cohecho se halla tipificado dentro de los delitos contra la administración pública en los artículos 419 a 427 bis.
Prevaricación
Es el abuso deliberado de poder que ejerce un funcionario público gracias a su cargo para actuar y dictar resoluciones arbitrarias a sabiendas en contra de la ley y del cumplimiento de su deber. Destaca tres tipos la prevaración del funcionario público, la prevariación judicial y la «prevariación» de abogados y procuradores que defienden intereses contradictorios y perjudican a sus clientes. Se halla tipificado dentro de los delitos contra la administración pública en los artículos 404 a 405.
¿Cómo pueden contribuir los detectives privados en la búsqueda de indicios de estos delitos?
Las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado no pueden realizar labores de investigación o vigilancia preventiva en este tipo de casos si no existen unos indicios claros de ello y que estos ya estén en conocimiento de la autoridad judicial, hallándose ya emprendidas diligencias por ello. Pero en cambio, sí que puede realizarlos un detective privado contratado por personas legitimadas en el caso, con el fin de poder encontrar los suficientes indicios o pruebas para poder ponerlo en conocimiento de las autoridades competentes, el detective privado como complemento de la seguridad pública ayuda así a proteger y salvaguardar los derechos de las personas o ciudadanos.
El detective privado en este tipo de casos de igual modo que en las investigaciones sobre corrupción entre particulares, cuenta con diversas técnicas que se utilizarán en función de cada caso concreto, podrá observar a través de vigilancias y seguimientos las actividades de las personas involucradas, interacciones sospechosas, recopilando así las pruebas para respaldar alegaciones de mala conducta y documentar así cualquier comportamiento sospechoso, también investigará transacciones financieras, podrá examinar registros contables, analizar registros financieros, seguimientos de transferencias bancarias así como documentación relacionada con el mal uso de fondos. Realizar entrevistas directas y encubiertas a testigos que pueden aportar testimonios y datos relevantes para la investigación, así como la obtención de pruebas documentales. También el detective privado también podrá contar con la ayuda de profesionales expertos en áreas jurídicas, económicas y financieras para aquellos aspectos que sean necesarios para el buen desarrollo de la investigación.